Fuente: La Voz de Galicia
Los visitadores nombrados por la Santa Sede para realizar una investigación en las instituciones y centros de los Legionarios de Cristo (LC) y del Regnum Christi (RC) fueron convocados a Roma, a finales del mes de octubre, donde presentaron a Benedicto XVI un primer informe sobre los resultados de su investigación. Según sacerdotes legionarios, la visita apostólica está prácticamente concluida. No obstante, los visitadores siguen trabajando en algunos centros que quedan pendientes, como en el caso de España, y porque todavía son muchas las personas, sobre todo laicas y consagradas del RC, que han solicitado ser recibidas por los visitadores y darles su testimonio. En fuentes cercanas a uno de los visitadores, se ha podido confirmar este encuentro. «Fuimos llamados a Roma con urgencia», dijo uno de ellos, quien precisó que las acusaciones de pederastia contra el fundador de la LC, Marcial Maciel, prácticamente no se han investigado.
Un dosier sobre Maciel
El motivo es que la Santa Sede dispone ya, desde hace años, de un importante dosier al respecto, que llevó a la condena de Maciel en el año 2005, y solo se están recibiendo ahora los testimonios de víctimas o afectados que han solicitado entrevistarse con alguno de los visitadores. El Papa, según las mismas fuentes, «tiene ya muy clara la situación de la Legión de Cristo y las acusaciones contra el fundador; en lo que estamos profundizando, a petición de la Santa Sede es en el cumplimiento de la supresión del cuarto voto o de caridad [el no hablar mal o denunciar a los superiores] ordenada por Roma».
Asimismo se está poniendo especial énfasis en investigar si las Constituciones que aplica la Legión corresponden a las aprobadas en su día por la Santa Sede, en la cuestión financiera y la titularidad de las propiedades y de los centros. La situación que se vive en los centros legionarios y del Regnum Chisti ha pasado del desconcierto cuando se hizo pública la decisión del Papa de investigar las obras de Maciel (tras reconocer la Legión que el fundador tenía una hija) a la angustia de muchos sacerdotes y consagrados del RC por el futuro, y a los abandonos de sacerdotes. «En la LC y el RC existen en estos momentos tres tipos de actitudes -explica un sacerdote legionario-. Los que siguen pensando que todo es falso; los que han abandonado y se han salido, y los que vivimos una tremenda frustración por el secretismo de nuestros superiores».
La inspección de los Legionarios de Cristo fue ordenada por Benedicto XVI en marzo, después de que los Legionarios de Cristo confirmaran que Maciel tuvo una amante con la que concibió una hija. El Papa nombró a cinco obispos como visitadores. Entre ellos, Ricardo Blázquez Pérez, el obispo de Bilbao.
Un dosier sobre Maciel
El motivo es que la Santa Sede dispone ya, desde hace años, de un importante dosier al respecto, que llevó a la condena de Maciel en el año 2005, y solo se están recibiendo ahora los testimonios de víctimas o afectados que han solicitado entrevistarse con alguno de los visitadores. El Papa, según las mismas fuentes, «tiene ya muy clara la situación de la Legión de Cristo y las acusaciones contra el fundador; en lo que estamos profundizando, a petición de la Santa Sede es en el cumplimiento de la supresión del cuarto voto o de caridad [el no hablar mal o denunciar a los superiores] ordenada por Roma».
Asimismo se está poniendo especial énfasis en investigar si las Constituciones que aplica la Legión corresponden a las aprobadas en su día por la Santa Sede, en la cuestión financiera y la titularidad de las propiedades y de los centros. La situación que se vive en los centros legionarios y del Regnum Chisti ha pasado del desconcierto cuando se hizo pública la decisión del Papa de investigar las obras de Maciel (tras reconocer la Legión que el fundador tenía una hija) a la angustia de muchos sacerdotes y consagrados del RC por el futuro, y a los abandonos de sacerdotes. «En la LC y el RC existen en estos momentos tres tipos de actitudes -explica un sacerdote legionario-. Los que siguen pensando que todo es falso; los que han abandonado y se han salido, y los que vivimos una tremenda frustración por el secretismo de nuestros superiores».
La inspección de los Legionarios de Cristo fue ordenada por Benedicto XVI en marzo, después de que los Legionarios de Cristo confirmaran que Maciel tuvo una amante con la que concibió una hija. El Papa nombró a cinco obispos como visitadores. Entre ellos, Ricardo Blázquez Pérez, el obispo de Bilbao.
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