domingo, 31 de octubre de 2010

Escándalo en la diócesis de Mondoñedo-Ferrol




Estimado José Carlos, ya estoy de vuelta en Roma, después de un nuevo periplo por Grecia. Recibí todas tus notas, traté los asuntos de tipo legal de que hablamos y no me queda más que animarte a que inicies el proceso de anulación de la nulidad de tu matrimonio.
Es una cuestión de justicia para todos los humanos, creyentes o no, católicos o ajenos al catolicismo romano. En tu caso se trata de que juez y testigos parecen parte contraria, y la Iglesia debe quedar libre de sospechas. Si algunos de sus miembros abusan de otro, el resto no tiene por qué quedar manchado por el abuso.
No puedo apartar de mi mente la vergüenza de tu historia con la mujer que no supo ser casta en el matrimonio, el sacerdote concupiscente que la indujo a pecar, la trampa en la que vivieron -y viven, sin temor de Dios- y la cobertura que les dieron otros miembros de la Iglesia, sobre todo uno tan significado como el que celebró la ceremonia de acogida en la comunidad cristiana a los que sólo habían establecido vínculo civil.
Es algo que clama el cielo, y que te obliga a actuar, en dos frentes: el puramente legal y el mediático.
Ante Dios estás obligado a pedir que se revise el proceso que condujo a la nulidad de tu matrimonio (ninguno de los juristas consultados aquí y en España dudan de las irregularidades que muestra la documentación que me enviaste). La disciplina interna da la Iglesia tendrá que dejar las cosas en su sitio.
Por otra parte, ya nos hemos acostumbrado a que los medios de información aireen las miserias de los hombres dedicados a Cristo que no hacían como Él en relación a los niños. Si la Jerarquía ya admitió que no puede revelarse contra esa evidencia, ¿por qué no ha de admitir un hecho bochornoso como en el que te ves implicado?
En fin, José Carlos, como los caminos del Señor son infinitos, mira tú que algunos tenemos como cierto lo que durante tantos años era de sospecha pública acerca de Camilo José Cela y "La cruz de san Andrés".
La autora del original copiado y arreglado nunca se arredró, su hijo abogado la apoyó; y ahora vemos cómo personas cercanas al autor reconocen que "esa obra nunca se debió haber publicado", mientras al editor lo espera un tribunal con acusaciones insuperables.
Ya sabes el dicho de nuestras abuelas, "Por moito que o demo cave, todo se sabe". Por mucho que se quiera ocultar el escándalo que amarga tu vida, acabará saliendo a la Luz: a la Luz de la Verdad que marcan los Evangelios.
Cuenta conmigo, y con mis amigos romanos, para lo que necesites (y hasta con la solidaridad de amigos griegos, cristianos ortodoxos, a los que escandaliza tu drama).
Un abrazo,
Emérito

Plagio de Cela en La Cruz de San Andrés


El premio Nobel se confesó a su bibliotecaria, Marisa Pascual, en la primavera del 2000

Autor:
Tomás Yebra
madrid/Colpisa.
Fecha de publicación:
31/10/2010
Iria Flavia (Padrón, Pontevedra). Primavera del año 2000. Una llovizna envuelve a los 500 habitantes de la pequeña localidad gallega. Marina Castaño sale de la Fundación Camilo José Cela, monta en su Jaguar con asientos de cuero beis y emprende viaje a Santiago de Compostela.
En la enorme casona se quedan solos Cela y Marisa Pascual, la bibliotecaria. El nobel disfruta a chupitos de un whisky ?Johnnie Walker. A medida que bebe se le va alegrando el entendimiento. Charlan de la infancia, de Vigo, de los jesuitas. En un momento dado, Marisa Pascual le pregunta: «¿Qué ocurrió con La cruz de San Andrés?». El nobel la mira a los ojos y dice sin titubear: «Todos cometemos errores en esta vida». Seguidamente apoya el vaso sobre la mesa y continúan conversando sobre diversos asuntos.
El hijo del nobel, Camilo José Cela Conde, vino a refrendar en su día las palabras del padre: «Esa novela nunca se debió publicar». Marisa Pascual, diez años después -y ya ex bibliotecaria de la fundación- recuerda con ternura al autor de Viaje a la Alcarria, «un hombre con mucha vitalidad» que acreditaba «un gran sentido del humor». Su voz se torna dulce y entusiasta cada vez que se refiere a don Camilo. «Me sentía muy arropada por él».
La historia de un error. Todo comenzó cuando Carmen Formoso, autora de la novela Carmen, Carmela, Carmiña , se detuvo ante el escaparate de la librería Arenas, en A Coruña. Allí vio La cruz de San Andrés, la obra con la que en 1994 Cela ganó el Premio Planeta y los 50 millones de su dotación. Formoso, que había presentado su novela al mismo certamen, entró en la librería, hojeó la solapa y le interesó el tema: era una historia parecida a la suya. «Qué casualidad», se dijo. Al llegar a su casa comenzó a leerla. «A las pocas páginas empecé a sentirme mal. No podía creerlo. Allí estaba mi vida, mis sentimientos, era como si me hubieran vampirizado».
A finales de 1998, el abogado Jesús Díaz, en representación de su clienta, Carmen Formoso, presentó en los juzgados de A Coruña una querella criminal en la cual se acusaba a la editorial Planeta y a Camilo José Cela de los delitos de «apropiación indebida» y «contra la propiedad intelectual». El caso fue archivado dos veces y otras tantas abierto: una por la Audiencia Provincial de Barcelona y la definitiva por el Tribunal Constitucional. Tras doce años de litigios, la titular del Juzgado de Instrucción número dos de Barcelona, Eugenia Canal, decretó a mediados de este mes de octubre la apertura de juicio oral contra el editor José Manuel Lara Bosch por presunto plagio de la obra Carmen, Carmela, Carmiña, de Carmen Formoso. La jueza acusa al presidente del Grupo Planeta de presuntos delitos «contra la propiedad intelectual, apropiación indebida y estafa» y requiere a Lara una fianza de medio millón de euros. No hay posibilidad de recurso. Tras una terca y empecinada lucha, Jesús Díaz ha conseguido sentar en el banquillo al todopoderoso editor. Si llega a estar vivo, Camilo José Cela hubiera corrido la misma suerte. Carmen Formoso tuvo la fortuna de que su hijo fuese abogado. De haber contratado a uno, la broma le hubiera salido por 190.000 euros.
«Todo este grotesco cambalache, toda esta canallada la urdieron, presuntamente, la que entonces era directora general de ediciones del Grupo Planeta, Ymelda Navajo, la esposa de Cela, Marina Castaño, la agente literaria Carmen Balcells y el propio Lara», explica Jesús Díaz Formoso. «Y el que transformó la novela de mi madre para convertirla en La cruz de San Andrés fue presumiblemente Mariano Tudela, uno de sus habituales 'negros'». Y añade: «Cela también metió la cuchara, y además muy bien metida, porque tuvo la genialidad de contar, entre líneas, el propio plagio, además de ciscarse en todos los que intervinieron en él».
El abogado de Carmen Formoso se refiere a un párrafo de La cruz de San Andrés escrito por el propio Cela que dice: «En estos rollos del papel higiénico La Condesita se va a narrar la crónica de un derrumbamiento El gladiador que va a morir saluda a César (a la editorial Planeta se lee entre líneas) con un corte de mangas porque también él juega y juzga y se ríe a carcajadas del César y de quienes van a escupir sobre su cadáver, sería espantoso imaginarnos a la humanidad demasiado sumisa, suenan los clarines porque ya empieza la misa negra de la confusión, el solemne acto académico de la más turbia de las confusiones».

Y los suyos le llaman Vicario de Cristo...


José Ignacio Fernández Rodríguez
Domingo 31 de octubre de 2010
LA Voz de Galicia
Estimado Sr. Director: Soy gallego. Montañero. He viajado mucho por casi todo el mundo por motivos de trabajo. He visto verdaderos horrores y también maravillas naturales,. Pero cada vez que salgo a hacer una excursión por mi tierra, Galicia, me conmuevo profundamente. Ello no obsta para que, aunque leo y hablo con fluidez varios idiomas, cuando veo algo en gallego mi reflejo inicial sea no leerlo. Por la rigidez del Gallego "normativizado". Por culpa de esa... repulsión estuve a punto de perderme la emotiva carta que Doña María Francisca Rodríguez Cabanas, de Ferrol, le dirigió ayer, sábado, en un gallego que me recordó el que oía hablar a mis padres a veces. Pero no fue eso lo que me emocionó, sino la sencillez y dulzura con la que desenmascaró la falsedad que rodea las actividades de la Iglesia, en general, y la próxima visita del Papa a Galicia, en particular. Es cierto que no hace falta cambiar de canal en la televisión para trasladarse a lugares exóticos, donde la negritud padece los horrores de la ausencia de medios para poder sobrevivir. Sin preocuparnos del color de la piel del pobre, lo podemos ver mucho más cerca, en España, en Galicia, en cada una de nuestras grandes o pequeñas ciudades. Pero eso, a los Obispos, al Sr. Rouco Varela (ahora Cardenal), al Sr. Ratzinger, con sus tiaras doradas, sus costosísimos anillos y sus grandes crucifijos, esa pobreza les importa... nada. Si acaso, sueltan un bla, bla, bla para que nos ocupemos de los pobres, si queremos, claro, porque son muy molestos. Aparte de que, si esa gente no tuviera tanto poder, estarían en la cárcel, sí, en la cárcel, entre otras cosas por complicidad necesaria y por encubrir a pederastas. Y el Sr. Ratzinger el primero, por prevaricación -como mínimo- porque antes de ser Papa era el encargado de recibir las denuncias de, llamémosles, las "malas prácticas" de los "empleados" de su "multinacional", y en lugar de pedir cuentas a sus "empleados" pederastas ordenaba barrer las cosas para "debajo de la alfombra". Si creyesen realmente en Jesús tendrían que estar aterrorizados por su falta de Caridad Cristiana. Por el mal uso que han estado haciendo del nombre de Jesús no creo que les perdone cuando les toque presentarse ante Él. Pero no tienen remedio: han estado haciendo lo mismo a lo largo de los últimos veinte siglos. Si acaso, solamente se salvarían los primeros apóstoles. A partir de ahí, comenzaron a preocuparse sólo de acumular poder y riquezas. Y a los demás, que les dén. Políticos e Iglesia forman una simbiosis para medrar. Salvo un puñaíto de honrosas excepciones. Ante las que yo me inclino humildemente.

Las cinco llagas de la Iglesia


Perseguido en vida y después de muerto, olvidado por largos años, el sacerdote italiano Antonio Rosmini fue beatificado el pasado 19 de noviembre del 2010 en Novara (Italia). Su obra más famosa, "Las cinco llagas de la Iglesia", fue prohibida por el Santo Oficio en 1849 pero tuvo el mérito de anticiparse en un siglo a las ideas del Concilio Vaticano II.

La primera llaga que señaló Rosmini es el foso abierto entre el clero y el pueblo. Culpaba a la celebración de los ritos en latín. Hoy, el problema es mayor. No se trata del latín; se trata del rito mismo, de su significación, de su influencia en la vida de los creyentes. Se trata de la usurpación de las celebraciones litúrgicas por parte del clero. Es cierto que no hay comunidad sin pastor, pero el pastor es un guía que ayuda en la orientación y en la conducción, pero se ha convertido en el dueño del rebaño y su único interlocutor.
La segunda llaga que preocupaba a Antonio Rosmini era la insuficiente formación del clero. Ahora la preocupación es a la inversa: tenemos un tenemos un clero erudito, con un tipo de estudios enciclopédicos agobiadores, una formación alejada “del mundo”

El viejo cura de pueblo que se imponía por su vida de servicio y de entrega y que se permitía tratar a los suyos como un abuelo, quedó en el baúl de los recuerdos. Ha cedido el paso a unas generaciones de curas petulantes, sabihondos, enigmáticos y manipuladores. Cristo no pidió para sus apóstoles que fueran algo separado del mundo, sino que fueran preservados del mal. Una reforma absoluta en este campo aparece también como necesaria. Esta segunda herida eclesial es una herida de fuertes dolores.


Las relaciones de poder
Rosmini veía como una tercera llaga la dependencia de los obispos del poder civil. Se trataba de una situación histórica que hoy aparece como superada en muchos países. Los acuerdos, los concordatos, la separación total entre Iglesia y Estado, han ayudado para que esa llaga cicatrice. Pero de hecho no ha sido así, sino que solamente ha cambiado de referente: las relaciones que hay que sanar ya no son para superar dependencias del poder civil sino aquellas que someten a las iglesias particulares a un centralismo desproporcionado al interior de la propia Iglesia.
los obispos son nombrados desde la curia vaticana según listados secretos que no consideran una consulta abierta al pueblo que va a gozar o padecer la acción de su pastor; las conferencias episcopales deben pedir el visto bueno para sus cartas pastorales de envergadura; los nuncios, si no son hombres prudentes, son vistos como espías que frenan las decisiones más audaces que superan la mera manutención de lo establecido. Los informes que se deben dar desde las iglesias locales a la curia romana son cada vez más minuciosos y exigentes; los teólogos, biblistas, pensadores y pastoralistas deben estar muy atentos a no decir una palabra de más o realizar un gesto menos formal, porque la lupa del Vaticano detecta las posibles desviaciones en doctrina o en costumbres y aplica su correctivo. Es un hecho que existe temor de muchos pastores frente a Roma. Es un hecho que existe una exagerada “papalatría”. Y hay algo más: las relaciones de poder entre la curia vaticana y los episcopados, con la atomización de estos últimos, originan un esquema que se repite a niveles descendentes: los obispos con su clero, el clero con su pueblo.

Los nombramientos episcopales
La cuarta herida señalada por Rosmini se refería a la exclusión del bajo clero y del pueblo en la elección de los obispos. Hoy día se mantiene el mismo estilo de elección, con el agravante que es quizá más secreto y errático el procedimiento. Las comunidades cristianas reciben a sus pastores impuestos desde arriba, por decisiones unilaterales en las que muchas veces priman los criterios o los traumas de los nuncios y de los funcionarios vaticanos por sobre las recomendaciones de las conferencias episcopales.
Hasta 1925, en Chile como en tantos países los gobiernos presentaban al Papa una terna de candidatos en la que procuraban incorporar gente de gran capacidad y de aceptación común del pueblo. De algún modo, una opinión extra clerical se dejaba sentir en Roma. Resulta curioso sin embargo, que el primer arzobispo de Santiago nombrado en 1931 sin intervención del Estado, José Horacio Campillo, un santo y ejemplar presbítero, tuviera que salir por la ventana, “invitado” a renunciar ocho años después. Un hecho que no sienta precedente pero que es una casualidad interesante. El actual sistema de nombramientos episcopales resulta misterioso, manipulable en las sombras, inconsulto al pueblo, sorpresivo.

En los primeros primeros siglos, una iglesia “fermento” mantiene ante la sociedad el principio electivo.
Lo mantiene ante todo por razones teológicas y de fidelidad al Evangelio: por una convicción sorprendentemente comunitaria de Dios y una convicción de que aún más grave que manipular a los hombres, es intentar manipular el Espíritu apropiándose privadamente de Él. Si surgen problemas se intenta armonizar las exigencias de la realidad con las exigencias del Evangelio, antes que negar simplemente éstas.
Y la autoridad está precisamente para ayudar a encontrar esos caminos de vigencia lo que parece pedir el Evangelio, en lugar de suplantarlo. Así es como los papas resultan ser los grandes defensores del principio electivo.
Una iglesia así, aún con sus torpezas y sus fallos humanos, que siempre los hay, resulto “sacramento de comunión” y levadura para la sociedad de su época
Más adelante y conforme nos acercamos al segundo milenio, una iglesia identificada con la sociedad no consigue mantener en pie el principio electivo.
No consigue mantenerlolo, en primer lugar, por la impresionante estratificación de aquella sociedad, en que “el laico” se reduce simplemente al Rey o los nobles.
También por la clericalización cada vez mayor de la iglesia. Así, “la iglesia” va reduciéndose primero al clero y luego a los canónigos catedralicios apropiándose ellos solos la elección.
La actual demanda que existe en un amplio sector eclesial más consciente, y que reclama una vuelta a la tradición primitiva en el tema de las decisiones episcopales, no procede de una falta de amor ni de obediencia, aún cando algunas veces se manifieste de forma ruidosa, de protestas o hasta de abandonos.
Es una demanda evangélica. No será cristiano reaccionar ante ella como suelen reaccionar los fariseos de todos los sistemas ante las voces proféticas: tratando de convertirlos en voces heréticas. Más bien, debe ser atendida coma una voz de Dios, que suele comenzar a abrirse camino de maneras desconcertantes, como o hizo a través del niño Samuel “Habla Señor, que tu siervo escucha” (1Sam3). Y hay que procurar abrirse a ella aún a costa de la propia seguridad o la sensación de amenaza del propio poder.
El actual sistema de nombramiento de los obispos lleva implícitamente a creer que la autoridad y la misión de los obispos proceden del papa. Y non es así: Non fue Pedro quien eligió a los apóstoles, ni tampoco Jesús por medio de Pedro, sino que fue directamente Jesús.

El control de los bienes
Finalmente, el abate Rosmini veía como una quinta y última llaga eclesial el control de los bienes por parte del poder civil. Pareciera que esa herida ya no existe hoy. La autonomía que las iglesias locales han logrado en su propia organización, lo que supone también libertad y responsabilidad en el tratamiento de los bienes, está estipulada y reconocida en documentos oficiales: tratados, concordatos, acuerdos bilaterales, leyes de libertad de culto.
Las grandes empresas por lo menos deben publicar una vez al año sus inventarios y el resultado de sus negocios, aunque sea manipulando información y diciendo sólo lo que les conviene. Las iglesias locales y el Vaticano son bastante reacias a entrar por un camino de mayor transparencia. No porque tengan algo que esconder, sino por el atávico convencimiento que a la Iglesia no la controla ningún poder de este mundo.


Fuentes:
http://www.voltairenet.org/article142189.html
Gonzalez Faus
Ningún obispo impuesto
Editorial Salterrae

sábado, 30 de octubre de 2010

Misteriosa muerte de Juan Pablo I




Fue hace 25 años. El papa Juan Pablo I apareció muerto en su cama. Llevaba sólo 33 días de pontificado. Según el comunicado oficial, murió de un infarto agudo de miocardio. Sin embargo, la forma en que se encuentra el cadáver no responde al cuadro típico del infarto: no ha habido lucha con la muerte, tiene unas hojas de papel en las manos, como si aún leyera.

Aunque oficialmente se negó, un benedictino que trabajaba en la Secretaría de Estado dio a conocer a un amigo, el mismo día de la muerte, que hubo autopsia. Por ella se supo que murió por la ingestión de una dosis fortísima de un vasodilatador, que en la tarde anterior habría recetado por teléfono su médico personal de Venecia.

En realidad, nunca me creí (y así lo manifesté) que el Dr. Da Ros, médico personal del papa Luciani, hubiera recetado una medicina contraindicada. Pero sólo él podía desmentir algo que tan directamente le afectaba. Pues bien, en 1993, tras quince años de silencio, el Dr. Da Ros declaró que Juan Pablo I estaba bien de salud y que aquella tarde no le recetó nada.

Por tanto, un diagnóstico sin fundamento, una autopsia secreta, un medicamento que mata al papa y que no ha recetado su médico personal... Sigamos.

El 14 de mayo de 1989 la llamada persona de Roma (para nosotros el cardenal Pironio) envía un informe a Camilo Bassotto, amigo personal del papa Luciani y testigo principal de la fuente veneciana. El informe va firmado, pero debe publicarse sin firma: el puesto que ocupa el misterioso comunicante no le permite otra cosa. Según dicho informe, Juan Pablo I tenía un programa de cambios y había tomado decisiones importantes, incluso arriesgadas: terminar con los negocios vaticanos, cortar la relación del Banco Vaticano con el Banco Ambrosiano, destituir al presidente del Banco Vaticano (Marcinkus), hacer frente a la masonería y a la mafia.

Todo esto se ha intentado ocultar. Sin embargo, tiene clara relevancia judicial. Desde la primera investigación (Yallop, 1984) las mayores sospechas recaen en la desaparecida logia Propaganda Dos, aunque hubiera colaboración interna dentro del Vaticano. El Banco Vaticano tuvo que pagar por la responsabilidad contraída en la quiebra del Ambrosiano más 240 millones de dólares. En el juicio por la quiebra, que concluye en 1992, las mayores condenas caen sobre los jefes de la logia P2: 18’5 años de cárcel para Licio Gelli y 19 para Umberto Ortollani. Sorprende la serie de asesinatos y atentados violentos relacionados de una u otra forma con la P2, con la mafia, con el Ambrosiano, con el Banco Vaticano: Ambrosoli, Alessandrini, Calvi, Sindona, Pecorelli..., sin olvidar el atentado contra Juan Pablo II, la desaparición de Emanuela Orlandi (hija de un empleado vaticano) y el triple crimen de la Guardia Suiza.

Don Germano Pattaro, sacerdote veneciano que Juan Pablo I llevó a Roma como consejero, dejó en su momento a Camilo Bassotto un testimonio fundamental sobre el papa Luciani, cuya figura ha sido injustamente distorsionada: “estaba en el camino de la profecía”. Esto no significa adivinar el futuro, sino hablar y actuar en nombre de Dios. Además, don Germano atestigua algo realmente sorprendente, que también tiene relevancia judicial: Juan Pablo I sabía a los pocos días de pontificado quién iba a ser (y, además pronto) su sucesor.



Comunicado oficial


Casi tres horas después del hallazgo del cadáver, el Vaticano dio el siguiente comunicado oficial: "Esta mañana, 29 de septiembre de 1978, hacia las cinco y media, el secretario particular del Papa, no habiendo encontrado al Santo Padre en la capilla, como de costumbre, le ha buscado en su habitación y le ha encontrado muerto en la cama, con la luz encendida, como si aún leyera. El médico, Dr. Renato Buzzonetti, que acudió inmediatamente, ha constatado su muerte, acaecida probablemente hacia las 23 horas del día anterior a causa de un infarto agudo de miocardio".

Realmente, pocas cosas quedan en pie de las afirmadas en dicho comunicado. Sólo una: se le encontró muerto en la cama, con la luz encendida, como si aún leyera. No fue el secretario, sino una religiosa quien encontró muerto a Juan Pablo I. La forma en que se encuentra el cadáver no encaja con el cuadro típico del infarto: todo está en orden, no ha habido lucha con la muerte. La hora de la muerte ha sido anticipada. Según diversas fuentes, el papa murió en la madrugada del día 29.

De forma tajante, el cardenal Oddi, que asistió al cardenal Villot durante el periodo de sede vacante, afirmó que no habría investigación alguna: "He sabido con certeza que el Sagrado Colegio cardenalicio no tomará mínimamente en examen la eventualidad de una investigación y no aceptar el menor control por parte de nadie y, es más, ni siquiera se tratará de la cuestión en el colegio de cardenales”.

Hallazgo del cadáver
Camilo Bassotto, testigo principal de la fuente veneciana, me dio esta versión del hallazgo del cadáver, la versión que le dio la religiosa que lo descubrió:

"Hablé en dos ocasiones con sor Vincenza. La primera, con la provincial delante. La segunda, a solas. En esta ocasión, sor Vincenza se echó a llorar desconsoladamente. Yo no sabía qué hacer. Sor Vincenza me dijo que la Secretaría de Estado le había intimidado a no decir nada, pero que el mundo debía conocer la verdad. Ella se consideraba liberada de tal imposición en el momento de su muerte (ya acaecida, en 1983). Entonces podría darse a conocer. Según sor Vincenza, el Papa estaba sentado en la cama, con las gafas puestas y unas hojas de papel en las manos. Tenía la cabeza ladeada hacia la derecha y una pierna estirada sobre la cama. Iniciaba una leve sonrisa. La frente la tenía tibia. Cuando Diego Lorenzi, sor Vincenza y otra religiosa fueron a lavar el cadáver, al volverle, tenía la espalda también tibia. El Papa pudo morir entre la una y las dos de la mañana".

Diego Lorenzi, secretario de Juan Pablo I, vio así el cadáver: "Tenía dos o tres almohadones a la espalda. La luz de la cama estaba encendida. No parecía que estuviera muerto. Y las hojas de papel estaban completamente derechas. No habían resbalado de sus manos ni habían caído en el suelo. Yo mismo cogí las hojas de su mano".

El Dr. Francis Roe, que fue jefe de cirugía vascular en el Hospital London de Connecticut, dice que hay algo verdaderamente sospechoso en la forma en que se encuentra el cadáver de Juan Pablo I:

"Los cuerpos muertos no están sentados sonriendo y leyendo. Conozco gente que muere durante el sueño, pero no conozco de nadie ni he visto morir a nadie en medio de una actividad como la lectura. Realmente, encuentro difícil creer que estuviera leyendo en el momento justo anterior a su muerte. Pienso que habría tenido tiempo suficiente para notar que algo estaba pasando. Habría sentido seguramente un dolor, y habría hecho algún esfuerzo para respirar, o para salir de la cama y pedir auxilio... He visto muchas muertes de esta clase, pero nunca he conocido a nadie que muriese sin inmutarse ante lo que le estaba pasando”.

Por su parte, el Dr. R. Cabrera, forense del Instituto Nacional de Toxicología, afirma lo siguiente: "La forma en que se encuentra el cadáver no responde de suyo al cuadro propio del infarto de miocardio: no ha habido lucha con la muerte. No existe otra sintomatología que lo delate... El cuadro encontrado podría responder mejor a una muerte provocada por sustancia depresora y acaecida en profundo sueño".



Juan Pablo I estaba bien
En agosto de 1993, me llamó Andrea Tornielli , de la revista 30 Giorni, de Comunión y Liberación. Estaban preparando un número dedicado a Juan Pablo I . Entre otras cosas, me preguntó sobre la salud de Luciani .

Juan Pablo I, respondí, estaba bien de salud. Su muerte fue totalmente inesperada. Cuando su secretario Diego Lorenzi le comunicó la noticia, su médico personal no se lo podía creer. El Dr. Da Ros “le había visitado el domingo anterior y le había encontrado con muy buena salud”.

El propio Lorenzi dio este testimonio sobre la salud de Luciani: “Puedo decir que en los 26 meses que yo he estado con él, Luciani no ha pasado nunca 24 horas en cama, no ha pasado nunca una mañana o una tarde en cama, no ha tenido nunca un dolor de cabeza o una fiebre que le obligase a guardar cama, nunca. Gozaba de una buena salud; ningún problema de dieta, comía de todo cuanto le ponían delante, no conocía problemas de diabetes o de colesterol; tenía sólo la tensión un poco baja”.

Tornielli me preguntó también sobre los hechos que se desarrollaron aquella tarde en el Vaticano. Le comenté el testimonio de Gennari , que fue profesor del Seminario Diocesano de Roma. Según Gennari, a Juan Pablo I “ se le hizo la autopsia” y “por ella se supo que había muerto por la ingestión de una dosis fortísima de un vasodilatador recetado por teléfono por su ex médico personal de Venecia”.

En mi opinión, le dije, es muy posible que a Juan Pablo I s e le hiciera la autopsia. Ello concuerda con lo que dice Lorenzi a Cornwell : “El primer día retiraron partes del cuerpo, posiblemente las vísceras, etc”. Obviamente, esto se podría confirmar por la apertura de archivos secretos o por la exhumación del cadáver. Es también posible que muriera por la ingestión de un vasodilatador. Es una medicina contraindicada para quien tiene la tensión baja. Ello encajaría con la forma en que se halla el cadáver: no ha habido lucha con la muerte, como corresponde a una muerte provocada por sustancia depresora y acaecida en profundo sueño.

Sin embargo, le dije también, no me puedo creer que el Dr. Da Ros , médico personal del papa Luciani , recetara por teléfono una medicina contraindicada: él podría desmentir algo que tan directamente le afecta.

Unos días después, me volvió a llamar Tornielli . Estaba especialmente interesado en la cuestión de si el Dr. Da Ros había visitado a Juan Pablo I u nos días antes de morir. Le dije que diversas fuentes coincidían en ello, aunque -claro- nadie mejor que el propio doctor para precisar estos extremos. Pero llevaba quince años de silencio...

Al final, salió el número de 30 Giorni. Apenas se publicó nada de la entrevista que se me hizo. Sin embargo, el número presenta una aportación fundamental. El Dr. Da Ros rompe su silencio para decir, entre otras cosas, que el papa estaba bien y que aquella tarde no le recetó absolutamente nada: “Todo era normal. Sor Vincenza no me habló de problemas particulares. Me dijo que el papa había pasado la jornada como acostumbraba. Luego nos pusimos de acuerdo para la próxima visita, que era para el miércoles siguiente”, “a quella tarde yo no le prescribí absolutamente nada, cinco días antes lo había visto y para mí estaba bien. Mi llamada fue rutinaria, nadie me llamó a mí”.

Comentando estas cosas, me dijo Camilo Bassotto: “Juan Pablo I p ensaba seguir con el Dr. Da Ros como médico personal y pensaba incluirle en nómina dentro del Vaticano”, “el Dr. Da Ros fue ignorado como médico personal de Juan Pablo I por los médicos del Vaticano”, “ni siquiera quisieron conocer su historial clínico”.

Por tanto, con este extraño modo de proceder, se emitió el diagnóstico oficial sobre la muerte del papa Luciani .


Una dosis letal
En junio de 1998, en Roma, pude hablar con Giovanni Gennari , que ahora es periodista en el servicio de prensa de la RAI, la televisión italiana. Gennari conocía personalmente a Luciani y era amigo de don Germano Pattaro , teólogo veneciano que Juan Pablo I s e llevó a Roma como consejero.

Gennari me confirmó lo publicado por él, o sea, que se le hizo la autopsia al papa Luciani y que “por ella se supo que había muerto por la ingestión de una dosis fortísima de un vasodilatador recetado por teléfono por su ex médico personal de Venecia”, que “el papa a las diez y media de la noche hizo abrir la farmacia vaticana”, que “el papa debió equivocarse y tomó una dosis altísima que le provocó un infarto fulminante”. Le pregunté que si su fuente era fiable. Me dijo: “Para mí es totalmente fiable. Me llamó a las siete de la mañana un benedictino que trabajaba en la secretaría de Estado con Benelli ”. Benelli fue Sustituto de la Secretaría de Estado antes de ser enviado a Florencia como arzobispo y ser nombrado cardenal, en junio de 1977.

Nunca he creído, le dije a Gennari , que el médico personal de Juan Pablo I, el Dr. Da Ros , le recetara una medicina contraindicada. Le dije también que el Dr. Da Ros se había manifestado al respecto en septiembre del 93: el papa estaba bien y aquella tarde él no recetó nada.

Comenté estas cosas con Marco Melega, conocido profesional de la televisión italiana, que preparaba por entonces un programa de la RAI 2 (Mixer, 14-3-1994) sobre Juan Pablo I. Utilizó como base mi libro Se pedirá cuenta (1990). Lo tenía totalmente subrayado. Me dijo que Gennari, a quien había entrevistado recientemente, valoraba especialmente mi libro. En él, como es sabido, no comparto la idea de que “el papa debió equivocarse”, hablo de muerte provocada en el momento oportuno.

En Roma pude hablar también, en la Farmacia Vaticana, con un hermano de San Juan de Dios, José Luis Martinez Gil. Me dijo lo siguiente : “De la Farmacia no salió nada en todo el mes para Juan Pablo I”, “el libro de la Farmacia no se puede ver, sin un permiso especial de la Secretaría de Estado”. Mi interlocutor lo había visto.

Como en otros viajes, me acompañó un matrimonio de la comunidad, Carlos y Carolina. Para que lo conocieran, nos acercamos al Colegio Español, donde residí del 65 al 69 y donde fui ordenado sacerdote. Saludamos al actual rector, Lope Rubio , que nos atendió amablemente. Estando allí nosotros (ciertamente, llama la atención) apareció un momento para despedirse del rector el actual obispo de Tarazona, Carmelo Borobia. El obispo (¡además!) aparece en el Anuario Pontificio (1977, 1978), que consultamos a continuación en la Biblioteca del Colegio. Borobia trabajaba entonces en la Secretaría de Estado. En la misma página aparece un benedictino (olivetano), el único benedictino que figura dentro del personal de la Secretaría de Estado: se llama Giuliano Palmerini . No sé si después de tantos años, alguno de los dos tendrá algo que decir. Aún están a tiempo.

Con todo ello, se refuerza la hipótesis de que efectivamente se le hiciera la autopsia a Juan Pablo I y de que, según la misma, muriera por la ingestión de una dosis fortísima de un vasodilatador. Ahora bien, si - como creemos - su médico personal no recetó nada aquella tarde y la farmacia vaticana no despachó nada, no se puede explicar todo por un error, como afirma Gennari . Hay que pensar en una acción criminal. Lo dijo el Dr. Cabrera , del Instituto Nacional de Toxicología: “Los vasodilatadores producen hipotensión. ¿Cómo se le pudo dar un vasodilatador a un hipotenso, como Luciani . Si se le dio un vasodilatador, no me cabe duda, eso es una acción criminal”. Además, ello encaja con la forma en que se encuentra el cadáver: no ha habido lucha con la muerte, todo está en orden.

La revista alemana Der Spiegel, con fecha 10 de noviembre de 1997, en un artículo que lleva por título “Cantidad letal” hace referencia a un misterioso testigo que finalmente ha decidido declarar sobre el asesinato del papa Luciani: “La fiscalía de Roma ha ordenado ahora una nueva investigación sobre aquel misterioso caso de muerte. No es la primera vez que los fiscales investigan sobre el caso del papa Luciani. Ahora un testigo misterioso sostiene que hace años llegó a saber por un conocido detalles que se refieren al homicidio del popular pastor de la Iglesia. Que el hombre sólo ahora se haya hecho vivo en los palacios de justicia probablemente tiene que ver con una serie de artículos aparecidos en el periódico La Padania... El fiscal Pietro Saviotti, que ha reabierto el caso de la muerte del papa en 1978, no quiere decir nada sobre las declaraciones del misterioso testigo: Sería demasiado pronto”.

Había tomado decisiones importantes
Un testimonio fundamental es dado once años después de los hechos por la llamada persona de Roma, que, con fecha de 14 de mayo del 89, fiesta de Pentecostés, y firmada a mano, envía a Camilo Bassotto una carta con unos apuntes. Entre otras cosas, dice: “Los apuntes que le adjunto son para usted. Había pensado tenerlos para mí. Me vino también la idea de publicarlos, pero el puesto que ocupo no me lo permite, al menos por ahora. El papa Luciani me gratificaba con su benevolencia y, me atrevo a esperar, también con su estima. Por qué quiso hacerme partícipe de algunos pensamientos expresados por él al cardenal Villot , no lo sé. Ellos constituyen un auténtico compromiso, vivo y presente en su corazón hasta el último día. Yo sostengo que se debe hacer justicia y dar testimonio de Juan Pablo I” .

He aquí algunos pensamientos que el papa Luciani llevaba en el corazón y que, además, quería que fueran conocidos. Juan Pablo I p ensaba, entre otras cosas:

- destituir al presidente del IOR (Instituto para Obras de Religión, Banco Vaticano) y reformar íntegramente el mismo, para que no se repitan experiencias dolorosas del pasado, que el papa Luciani sufrió ya de obispo y que de ningún modo quiere que se repitan siendo papa.

- tomar abierta posición, incluso delante de todos, frente a la masonería y la mafia.

Como consta en el documento de la persona de Roma, Juan Pablo I era consciente del riesgo que corría. Dijo al cardenal Villot : “Eminencia, usted es el Secretario de Estado y es también Camarlengo de la Santa Romana Iglesia, usted sabe mejor que nadie que el papa tiene que actuar con prudencia y con paciencia, pero también con coraje y confianza. El riesgo lo ponemos todo en las manos de Dios, del Espíritu Santo y de Cristo Señor. Estos pensamientos que le confío, de momento brevemente, los llevo muy en el corazón. Usted me ayudará a realizarlos de forma adecuada”.

Juan Pablo I, con firmeza ya demostrada en asuntos semejantes, quería poner orden en las finanzas vaticanas. Para ello pensaba destituir al obispo Paul C. Marcinkus , presidente del IOR, Instituto para las Obras de Religión, llamado también Banco del Vaticano. Una tarde, el secretario de Estado cardenal Villot le habló del IOR en estos términos: “El IOR es una piedra caliente que abrasa en las manos de todos. Alguno corre el riesgo de quemarse”. Juan Pablo I le dijo claramente: “En cuestiones de dinero la Iglesia debe ser transparente, debe obrar a la luz del sol. Va en ello su credibilidad. Se lo digo también a usted. La Iglesia no debe tener poder, ni debe poseer riquezas”.

Le dijo también Luciani a Villot: “El presidente del IOR debe ser sustituido: cuando usted lo juzgue oportuno. Deberá hacerse de modo justo y con respeto de la dignidad de la persona. Un obispo no puede presidir y gobernar un banco. Aquella que se llama sede de Pedro y que se dice también santa, no puede degradarse hasta el punto de mezclar sus actividades financieras con las de los banqueros, para los cuales la única ley es el beneficio y donde se ejerce la usura, permitida y aceptada, pero al fin y al cabo usura. Hemos perdido el sentido de la pobreza evangélica; hemos hecho nuestras las reglas del mundo. Yo he padecido ya de obispo amarguras y ofensas por hechos vinculados al dinero. No quiero que esto se repita de papa. El IOR debe ser íntegramente reformado”.

De tiempo atrás, la relación de Marcinkus con Luciani era tensa. Marcinkus no había recibido bien la elección del nuevo papa. Luciani lo sabía. Le dijo a Villot : “Alguno aquí, en la ciudad del Vaticano, ha definido al papa actual como una figura insignificante. No es un descubrimiento. Siempre lo supe y nuestro Señor antes que yo. No fui yo quien quiso ser papa. Yo, como Albino Luciani, puedo ser una zapatilla rota, pero como Juan Pablo es Dios quien actúa en mí. Siento que necesitaré mucho coraje, mucha firmeza, gran humildad, mucha fe y mucha, mucha caridad. Un obispo, alto y robusto, siempre de esta casa, ha declarado que la elección del papa ha sido un descuido del Espíritu Santo. Puede ser. No sé entonces cómo ha ocurrido que más de cien cardenales han elegido a este papa por unanimidad y con entusiasmo”.

Juan Pablo I p ensaba tomar abierta posición, incluso delante de todos, frente a la masonería y frente a la mafia. En el informe de la persona de Roma esta posición del papa aparece a continuación, después de hablar de la destitución de Marcinkus y de la reforma integral del IOR. Le dijo a Villot : “No se olvide que la masonería, cubierta o descubierta, como la llaman los expertos, no ha muerto jamás, está más viva que nunca. Como no ha muerto esa horrible cosa que se llama mafia. Son dos potencias del mal. Debemos plantarnos con valentía ante sus perversas acciones. Debemos vigilar todos, laicos, curas, y especialmente los párrocos y los obispos. Debemos proteger a las gentes de nuestras comunidades. Es un tema que un día afrontaremos con más claridad delante de todos”.

Todavía no se había publicado la lista de la logia P2, que en Italia constituía un Estado dentro del Estado. Fue en mayo del 81 y su publicación provocó la caída del gobierno italiano. Pero, sobre su mesa de trabajo, tenía el papa Luciani una lista de presuntos masones vaticanos, elaborada por el periodista Mino Pecorelli , miembro arrepentido de la logia P2. Como es sabido, en el juicio por la quiebra del Banco Ambrosiano, las mayores condenas caen sobre los jefes de la P2: 18 años y medio de cárcel para Licio Gelli y 19 para Umberto Ortollani.

Estaba en el camino de la profecía
Muy importante es el testimonio de don Germano Pattaro , sacerdote y teólogo veneciano, llamado por Juan Pablo I a Roma como consejero. Pertenece también a la fuente veneciana.

De su testimonio emerge la figura de un papa profeta, que quiere hablar y actuar en nombre de Dios: un papa que no quiere ser jefe de Estado, que no quiere escoltas ni soldados, que se abandona totalmente al Señor, pase lo que pase; un papa que quiere la renovación de la Iglesia, sin olvidar las razones profundas que hicieron necesario el Concilio; un papa que no quiere gobernar solo, sino con los obispos; un papa que pide perdón por los pecados históricos de la Iglesia, como la Inquisición, el poder temporal de los papas, el odio a los judíos y la tolerancia ante las masacres de los indios, el racismo y las deportaciones de los pueblos africanos; un papa que reivindica la figura profética de quienes valientemente denunciaron el genocidio de aquellos pueblos; un papa que quiere hacer justicia a todos aquellos que en tierras de misión, en el Este y en América Latina, han sido encarcelados, torturados, exiliados o asesinados por causa de Cristo; un papa que denuncia fuertemente el sistema económico internacional; un papa que se pone al lado de quienes, de cualquier raza y religión, defienden los sacrosantos derechos del hombre; un papa que quiere promover en el Vaticano un gran instituto de caridad, donde poder hospedar a quienes duermen por las calles; un papa que quiere diez discursos menos y un testimonio más; un papa que sabe, a los pocos días de pontificado, quién será (y, además, pronto) su sucesor; un papa que no se deja intimidar, a pesar de las dificultades encontradas
.

Muerte anunciada
Con fecha 12 de septiembre de 1978, el periodista Mino Pecorelli publicó en su revista OP (Osservatore Político) un artículo titulado La gran logia vaticana. En él se decía que el 17 y el 25 de agosto la agencia de prensa Euroitalia había dado los nombres en código, el número de matrícula y la fecha de iniciación a la masonería de cuatro cardenales considerados papables: Baggio , Pappalardo , Poletti , Villot.

“ Nos hemos hecho, decía Pecorelli, con una lista de 121 masones: cardenales, obispos y altos prelados indicados por un número de matrícula y nombre codificado. Ciertamente, la lista puede ser apócrifa, incluso la firma de un cardenal hoy puede ser falsificada”. En cualquier caso, “el papa Luciani tiene ante sí una difícil tarea y una gran misión. Entre tantas, la de poner orden en las alturas del Vaticano” .

En el mismo número de OP, Pecorelli proponía a sus lectores la extraña historia de un papa laico, Petrus Secundus, que muere asesinado tras un breve y tempestuoso pontificado. El papa “es periodista en un diario”. El obispo Luciani había confesado en una entrevista: “Si no hubiera sido obispo, hubiera querido ser periodista”. Además, se hicieron famosos sus artículos en la revista Mensajero de San Antonio (Padua) y en el diario Il Gazzettino de Venecia.

El nuevo papa “toma el nombre de Pedro Segundo sólo porque rechaza cambiar de nombre, así como rechaza también aspectos importantes de la Iglesia que, forzado por las circunstancias, ha aceptado dirigir. Breve y tempestuoso es el pontificado de este papa que terminará asesinado por obra de fuerzas políticas adversas, alarmadas por sus denuncias”.

Su elección, dice Pecorelli, se produce “por aclamación y por mayoría casi unánime”, como sucedió con Juan Pablo I. Pues bien, en la inauguración del pontificado, dijo el nuevo papa Pedro Segundo:

- “La elección de un laico al papado es un hecho insólito en los tiempos recientes, dijo el papa. A mí el acontecimiento me ha caído encima de improviso, dejándome turbado y lleno de aprehensión. Lo estoy todavía y a veces me pasa que me considero la víctima de un acto del cual sin embargo se me ve protagonista”.

- The son of a bitch is fishing for solidarity, dijo en la Casa Blanca el presidente que seguía el discurso con sus consejeros.

- “Pero vamos al grano, dijo el papa, pienso que ningún rey, ningún presidente, ningún emperador y ningún papa tienen derecho a comer si antes no han comprobado que todos sus súbditos, ciudadanos y seguidores pueden hacerlo...El presidente, el papa no podrán enviar embajadores ante los poderosos de la tierra si antes no han enviado sus mensajeros ante aquellos que sufren injusticia, que padecen tiranía, que gimen en las cadenas de las muñecas y de las mentes”.

- “Está loco como Cristo y es tan peligroso”, dijo el presidente del Consiglio italiano, “en las próximas elecciones perderemos cuatro millones de votos”.

- “Y ahora basta de palabras, concluyó el papa. El tiempo apremia y debemos pasar a los hechos. De todo corazón, os agradezco que me hayáis escuchado”.

- “La Iglesia se está hundiendo, dijo furioso un cardenal conservador, y pierde toda influencia. La gente no cree ya en nada, y ahora ni el papa da ejemplo”.

El papa decidió comenzar un trabajo en el que había pensado a menudo desde los primeros días: “Se trataba de un trabajo ímprobo y lleno de peligros: hacer el censo de las riquezas de la Iglesia. No se trataba sólo de saber lo rica que era, sino de dividir lo que era fácilmente enajenable de lo que no lo era. La idea de Pedro era usar el beneficio para ciertos fines, a su parecer esenciales”.

Como queda dicho, el nuevo papa es asesinado “tras un breve y tempestuoso pontificado”.

Todo esto lo publica Pecorelli diecisiete días antes de la extraña muerte del papa Luciani. Es, justamente, la crónica de una muerte anunciada.

Dos semanas después, el 26 de septiembre, Pecorelli publica el artículo titulado Santidad, ¿cómo está? Pregunta enigmáticamente por la salud del papa Luciani y habla de la reacción que suscitan los cambios que pensaba hacer: “Hoy en el Vaticano muchos tiemblan, y no solamente monseñores y sacerdotes, sino también obispos, arzobispos y cardenales”.

Pecorelli , que tuvo estrechos contactos con los servicios secretos italianos, anunció de diversas maneras el trágico destino de Aldo Moro, presidente de la DC y artífice del nuevo gobierno italiano, en el que por primera vez el partido comunista italiano llegaba al poder . Fue también en 1978, “el año de Europa”, que para el secretario de Estado norteamericano Henry Kissinger significaba situarse “en el contexto de la política americana”. El 16 de enero de 1979 Pecorelli anunció nuevas revelaciones, pero dos meses después fue asesinado de un tiro en la boca, por hablar.

Caso abierto
Para el Vaticano la desaparición de Juan Pablo I es un caso cerrado el 29 de septiembre de 1978. Para muchos es un caso abierto, también para el magistrado italiano Pietro Saviotti, de la Fiscalía de Roma. El autor de estas líneas le envió sus dos libros hace un año, ofreciéndole los resultados de su investigación y poniéndose a su disposición.

En el plano eclesiástico, se han dado los primeros pasos hacia el proceso de beatificación del papa Luciani. Contradiciendo una tradición secular que se refiere a los papas, la causa de beatificación no parte de Roma, sino de su tierra de origen, donde es recordado por su “santidad ordinaria”. Es decir, el planteamiento es este: ¡qué bueno era! Sin embargo, hay que decirlo claramente, un proceso de beatificación que eludiera el modo de la muerte estaría viciado de raíz. Para nosotros, Juan Pablo I es mártir de la purificación y renovación de la Iglesia.



Jesús López Sáez






viernes, 29 de octubre de 2010

Me llamarán subversivo




Con un callo por anillo,

monseñor cortaba arroz.

?Monseñor "martillo

y hoz"?


Me llamarán subversivo.

Y yo les diré: lo soy.

Por mi pueblo en lucha, vivo.

Con mi pueblo en marcha, voy.


Tengo fe de guerrillero

y amor de revolución.

Y entre Evangelio y canción

sufro y digo lo que quiero.

Si escandalizo, primero

quemé el propio corazón

al fuego de esta Pasión,

cruz de Su mismo Madero.


Incito a la subversión

contra el Poder y el Dinero.

Quiero subvertir la Ley

que pervierte al Pueblo en grey

y al Gobierno en carnicero.

(Mi pastor se hizo Cordero.

Servidor se hizo mi Rey).

Creo en la Internacional

de las frentes levantadas,

de la voz de igual a igual

y las manos enlazadas...


Y llamo al Orden de mal,

y al Progreso de mentira.

Tengo menos Paz que ira.

Tengo más amor que paz.


...! Creo en la hoz y el haz

de estas espigas caídas:

una Muerte y tantas vidas!

! Creo en esta hoz que avanza

- bajo este sol sin disfraz

y en la común Esperanza -

tan encurvada y tenaz!

¿Por dónde llegará el Papa?




• Con LOS EVANGELIOS, como fiel espejo de la realidades, habrá que ver Obispo Martínez por que "Camino" se acerca a nuestra España quien mejor ahora representa a ese Jesús de quien han recibido misión apostólica y representatividad:
Si por el Sur por donde llegan los desesperados MÁS PEQUEÑOS DE LOS HERMANOS, sin absorber inversiones y en cayucos y pateras.
O por el Noreste por donde llegará en avión y Papamóvil, como Papa y Soberano Absoluto del Estado Vaticano, el actual Pedro, con idéntica misión con ese presupuesto y rentabilidad (según Vd,) asegurados.
Porque como no se den prisa a reformar los Evangelios, en ellos, ande por donde ande el Papa, y digan sus fans lo que dicen, lo que podremos leer, creyentes y ateos. es aquello de Mt, XXV: CONMIGO hacéis , o no, LO QUE con UNO CUALQUIERA DE MIS MÁS PEQUEÑOS HERMANOS. Con LOS EVANGELIOS, como fiel espejo de realidades, habrá que ver Obispo Martínez por que "Camino" se acerca a nuestra España quien mejor ahora representa a ese Jesús de quien han recibido misión apostólica::
Si por el Sur por donde llegan sin absorber inversiones los desesperados en cayucos y pateras.
O por el Noreste por donde llegará el actual Pedro, con ese presupuesto y rentabilidad (según Vd,) asegurados como Papa y Soberano Absoluto del Estado Vaticano.
Porque como no se den prisa a reformar los Evangelios, allí, ande por donde ande el Papa, y digan sus fans lo que dicen, lo que podremos leer creyentes y ateos es aquello de Mt, XXV: CONMIGO hacéis , o no, LO QUE con UNO CUALQUIERA DE MIS MÁS PEQUEÑOS HERMANOS

El 'papamóvil' aterriza en Santiago a bordo de un avión del Ejército



El papamóvil en el que Benedicto XVI se desplazará el próximo 6 de noviembre durante su visita a Santiago de Compostela ha llegado hoy a bordo de un avión Hércules del Ejército al aeropuerto de Lavacolla, desde donde fue trasladado a la Comisaría de Policía en el centro de la capital.

La Conferencia Episcopal ya reconoció que considera "un negocio" la visita del Papa, que costará que costarán 3 millones de euros ("el chocolate del loro") a la administración.

¿Tiene este señor autoridad moral para dar consejos a nadie? Pensemos que durante lustros, ha sido el que ha ocultado a los pederastas de todo el mundo.

Cuando habla de caridad, ¿por qué no nos cuenta el dinero que ha aportado su iglesia en las catástrofes de Haití y Chile? ¿Quizás sea por que no ha dado ni un céntimo?

Benedicto : "Obras son amores y no buenas razones"
A los papas, les encanta que los estados gasten en ellos, pero por el contrario ellos no invierten en ningún tipo de necesidad de las gentes. Juan Pablo I quiso una iglesia mas caritativa y en un mes acabaron con él.


Hoy hace Xabier Pikaza unas buenas preguntas en su blog:


He hablado ayer de la visita del Papa a Santiago y a Barcelona. Esa visita es un juego de niños en relación con lo que hoy propone el evangelio.

Supongamos que el que viene a Santiago de Compostela es el mismo Jesús de Nazaret (no el Papa que está en el Vaticano), haciendo el Camino, para visitar a su viejo amigo Xacobo, el Zebedeo, Hijo del Rayo ¿Cómo iría? Dicen que sabía andar e burro. ¿Dónde se hospedaría? Dicen que dormía en cualquier sitio, que no tenía piedra fija que le sirviera de almohada ¿Qué diría en Lavacolla y en el Obradoiro?

Supongamos que viene a Barcelona: ¿Imagináis que tendría tiempo para visitar las piedras geniales de Gaudí? Dicen que no le importaban las piedras, que y no fue a ver los templos de Gerasa y que se enfadó cuando le dijeron lo grande que quera el templo de Jerusalén (Mc 13, 1-3). De todas formas, pienso que iría a ver lo de Gaudí.... De todas formas, quizá se pasraría antes por el entorno del Prat, y en el Valle Hebrón. Quizá iría a ver a sus amigos de la vieja C. Modelo. Al fin, llegaría, estoy seguro, al Templo de la Sagrada Familia ¡Qué diría, qué haría?

(Es decir: ¿qué me diría? ¿qué nos diría?))

http://blogs.periodistadigital.com/xpikaza.php/2010/10/29/dom-31-x-10-iadivina-quien-viene-a-cenar#comments

miércoles, 27 de octubre de 2010

La idolatría es el mayor obstáculo para la misión mundial, dice teólogo inglés



CIUDAD DEL CABO, Sudáfrica (Christian Today) El respetado teólogo inglés Chris Wright dio una desafiante crítica del movimiento evangélico cuando dijo que un número preocupante de sus dirigentes son culpables de idolatría.

"Hoy el pueblo de Dios, como en el Antiguo Testamento, han caído en la adoración de los falsos dioses e ídolos del mundo", dijo el director internacional de asociaciones Langham con sede en el Reino Unido, mientras hablaba ante los miles de asistentes al Tercer Congreso Lausana para la Evangelización Mundial.

"...La idolatría es el mayor obstáculo para la misión mundial", dijo Wright, quien será el principal redactor del tan esperado Compromiso de Ciudad del Cabo que va a salir de la reunión de una semana con los líderes cristianos de mentalidad misionera.

Según Wright, los tres ídolos de ellos son: el poder y el orgullo, la popularidad y el éxito y la riqueza y la codicia.

Muchos líderes evangélicos, dijo, se han obsesionado acerca de su estado y poder en la Iglesia Cristiana y se han vuelto desobedientes a Cristo en el proceso. Ellos adoran la popularidad, por lo que exageran o presentan estadísticas deshonestas para verse con más éxito de lo que son, similares a los falsos profetas de la antiguedad, estos líderes afirman hablar la Palabra de Dios, pero en realidad actúan en su propio interés.

"La Iglesia fue cegada por estos súper apóstoles quienes se jactan de sus credenciales y su habla impresionante y gran popularidad", dijo el teólogo, cuyo ministerio una vez fue dirigido por John Stott, el líder evangélico que fue el principal redactor de los dos primeros pactos de Lausana.

Pero el Reino de Dios no se puede construir sobre los cimientos de la deshonestidad y mentiras, como las estadísticas de éxito dudoso, dijo. Asimismo, no se puede construir sobre la base de la falsa enseñanza del evangelio de la prosperidad, que distorsiona lo que significa ser bendecido por Dios y no enseñan adecuadamente sobre el sufrimiento y la cruz, agregó Wright.

"Somos un escándalo y un obstáculo para la misión de Dios", afirmó Wright.

El líder de este respetable ministerio pidió a los evangélicos a hacer un "cambio radical" a Dios y a "caminar en la sensillez de Jesús, porque no podemos servir a Dios y al maná."

"¿Cuál crees que es el mayor obstáculo para el deseo de Dios para la evangelización del mundo? No es de otras religiones. No es la persecución. No es la resistencia de las culturas.

"El mayor problema de Dios en su misión redentora en el mundo es su propio pueblo."

"Lo que duele más a Dios es no sólo el pecado del mundo, sino también el fracaso, la desobediencia y la rebelión de aquellos a quienes Dios ha redimido y llamado a ser su pueblo."

Esta idolatría, dijo, se había convertido en la "mayor amenaza" para la misión mundial. En algunas partes de la comunidad evangélica, una "obseción" con las estadísticas y los resultados estaba dando lugar a afirmaciones disparatadas y números sin fundamento, e "informes falsos, manipulación y complicidad en la mentira".

"No podemos construir el Reino de Dios sobre las bases de la falta de honradez, diciendo mentiras acerca de nuestro éxito o aceptar lo que sabemos que son estadísticas cuestionables para poder acceder a subvenciones y financiación para nuestros proyectos. [Esto] es nada menos que inclinarse ante la idolatría del éxito manipulado."

A pesar de que tienen razón al afirmar lo que la Biblia tiene que decir acerca de la bendición de Dios y el poder del Espíritu Santo, Wright dijo que algunos predicadores estaban distorsionando la Biblia "de apelar a la codicia humana", mientras que no hacen mención de lo que la Biblia tiene que decir sobre el sufrimiento y el llamamiento a todos los creyentes a tomar su cruz.

Tales predicadores del evangelio de la prosperidad, dijo, están teniendo éxito "sólo en el enriquecimiento de sí mismos" en un estilo de vida que es contraria a la enseñanza y el ejemplo de Cristo.

También marcados por la crítica fueron los falsos profetas y "súper apóstoles" que, aunque populares entre los miles de cristianos, "no se preocupan por los débiles y los pobres", "ninguna muestra de las marcas del apóstol", y en eso "no se parecen al Cristo crucificado."

Incluso el preocuparse por el estado, la oficina o el poder en la iglesia cristiana y en la obra cristiana, dijo, era "desobediencia pura a Cristo [que] destruye la misma cosa qye estamos tratando de lograr."

Advirtió que el nivel de la idolatría entre los cristianos era tal que se habían convertido en un "escándalo" y un "obstáculo" para la misión de Dios, y ya no podían hablar en forma creíble contra los errores del mundo.

"La tragedia es que muchos líderes cristianos, incluidos los líderes de la misión, no superen estas pruebas [del poder, la popularidad y la riqueza], precisamente aquellos que Jesús los venció. Ellos simplemente no pueden resistir la tentación de elevar el estado [y] el éxito de la manipulación", dijo.

"Toda la Iglesia paga el costo de su fracaso en la integridad y la credibilidad perdida. Y así, cuando incluso se atreven a señalar con el dedo de la crítica en el pecado del mundo se nos dice sin rodeos y con razón 'limpien su propio patio trasero'."

Wright dijo que la reforma había vuelto a ser la "necesidad desesperada de estos días", comenzando con los evangélicos.

Instó a los cristianos a arrepentirse y dejar de ignorar sus propias faltas como él pidió un "cambio radical" a Jesús y la Escritura, así como la predicación basada en la Biblia.

"Antes de salir al mundo debemos volver al Señor. Si queremos cambiar el mundo primero tenemos que cambiar nuestros propios corazones y las formas. Al tomar las palabras del Evangelio al mundo, también debemos llevar con nosotros las palabras de la confesión a Dios, y antes de bajar nuestros asientos para buscar a los perdidos tenemos que ponernos de rodillas para buscar al Señor."

Concluyó con tres palabras para la Iglesia de hoy, humildad, integridad y sencillez.

"¿Estamos 'su' gente? Vamos a continuación, a ser lo que somos por el amor de Dios, por el bien de nuestra misión y por el bien del mundo."

El tema del sábado para el Tercer Congreso de Lausana para la Evangelización Mundial, también conocida como Ciudad del Cabo 2010, era la integridad. El plenario de la mañana, en el que Wright fue el orador principal, fue titulado, "Llamada a la Iglesia de Cristo a volver a la humildad, integridad y sencillez."

Durante el sábado por la tarde en la conferencia de prensa, Wright explicó que su discurso fue inspirado por un amigo y erudito que visitó su país de origen en América Latina. El amigo informó que asistió a diez diferentes iglesias que dicen ser evangélicas, pero ninguno de ellos predica la Biblia. Por otra parte, los pastores de dichas iglesias ejercían un gran poder sin rendición de cuentas, y eran bastante ricos.

Después de escuchar la historia de su amigo, Wright se dio cuenta de que el movimiento evangélico necesita una "reforma", porque se enfrentan a problemas similares a la de la Iglesia Católica medieval antes de la Reforma Protestante.

"Esto no es algo casual. Esta es una corrupción profundamente arraigada en la Iglesia de Cristo", dijo Wright. "Y por supuesto esto no es sólo en América Latina, sino en todo el mundo."




Fuente:



http://diarioberea.blogdiario.com/1287936900/

Sr Angel Paz Gomez, esto ya no hay quien lo pare



En el Vaticano ya han visitado mi blog esta tarde y hace pocos minutos se solidarizan conmigo en la siguiente carta que me llega desde Corfú y que comparto con mis amigos lectores del blog:
Estimado José Carlos: por las copias de mensajes que me mandas, ya veo que son muchas las pesonas que se solidarizan contigo. El caso de ese sacerdote del Opus Dei me parece alentador: cuando la carne flaquea, el que tiene votos hace bien en castigarla. Tiene razón: para algo está el cilicio.
Te escribo desde la isla bellísima de Corfú, donde me encuentro tratando asuntos de la aceituna. ¡Qué maravilla los "bosques" de olivos de esta tierra privilegiada! Vengo de cenar con mi colega Vasilis, y estuvimos recopilando impresiones de nuestra visita su padre, a la vista de la costa de Albania.
El padre de Vasilis es sacerdote ortodoxo, como ya fue su padre. Desde que enviudó, vive retirado en modo monástico y contemplativo. Este anciano, como muchas personas cultas de Corfú, habla italiano (es lástima no tener tiempo para aprender griego moderno). En italiano nos entendimos, y fue en tan flúida lengua que le expliqué tu historia, por indicación de Vasilis, que ya la conocía.
La verdad es que le causé una impresión grave, ante la cual se santiguó repetidas veces. Su comentario final fue sencillo: "Que el Señor tenga misericordia de tanto pecador. No hay mayor pecador que el que falta a sus votos: en vida lo persigue su conciencia y a la hora de la muerte lo espera el tribunal de Dios".
Quedé muy impresionado, mucho. Durante la cena, Vasilis me instruyó sobre las costumbres del clero ortodoxo, que yo llevo observando durante décadas de andar por Grecia, Rumanía y Rusia. Le conté una anécdota de mi adolescencia que provocó en él cierta sensación de conmiseración hacia nosotros, los católicos romanos.
Cuando yo ya no era muy inocente (sabes que la vida en las aldeas está llena de insinuaciones naturalistas), me convidó el cura de mi parroquia, en la que ejercía de monaguillo, a la fiesta de la patrona, santa Marta.
Allí se juntaron los "abades", como se les llama en Galicia, de parroquias próximas, y dieron suelta a la gula, a punto de que mi cuerpo llegó a rechazar aquella profusión de manjares. Sin edad todavía para el vino, a penas mojé los labios en lo que me ofrecieron, pero vi como se ponían ebrios los que me debían enseñar buenas maneras.
Cuando la tarde, en pleno verano, iba cayendo, todavía apuraban cálices de vino dulce. Entonces entraron en picardías sobre las mujeres que les atendían las rectorías y los iglesarios.
Eso excitó mi atención (la verdad es que, hasta ese momento, me estaba aburriendo, y no me marchaba por temor a que mi madre me reprendiera por haberlo hecho). Como en un desafío, los sacerdotes de Cristo allí presentes expusieron las virtudes de sus amas y sus criadas, y cuál no sería mi espanto al oír que el viejo respetable que se encontraba delante de mí decía "Mulleres, iso é o mellor que un leva desta vida".
Pocos días después vino a visitarnos uno de mis primos que estudiaban en el seminario de Mondoñedo y yo, incauto, le conté el suceso.
Mi primo se ruborizó en silencio y, después de un poco, midiendo sus palabras, me conminó a callar para siempre lo que había ocurrido delante de mí...
En fin, José Carlos, aquí, en la soledad de mi habitación de hotel en Corfú, te escribo para que veas que uno tiene derecho a poner en duda verdades al parecer absolutas (mira las cartas al director en los periódicos sobre las visitas del Papa).
Creo que el celibato debe ser como el que comenta el miembro del Opus Dei ordenado con voto de castidad. Si no (y no voy a traer a san Pablo en citas que conocemos hasta los que sólo tratamos las epístolas como lectores), es mejor no abrasarse y vivir como lo hacen los padres ortodoxos: con una casta familia.
Soy católico romano y quisiera que la Cristiandad no tuviese fisuras, pero a veces me inclino por soluciones para hacer Iglesia que me llevan los ojos muy lejos de Roma.
Con mis mejores deseos de que triunfes en tu reivindicación,
Emérito


martes, 26 de octubre de 2010

Angel Paz Gomez, juez eclesial de Mondoñedo-Ferrol y las nulidades de matrimonio





Estimados amigos: hoy me ha llegado otra carta de Roma a la bandeja de mi correo electrónico mostrando su apoyo y solidaridad conmigo firmada por Emérito .


Emérito me dice que es un funcionario da FAO, Food and Agriculture Organization, de la ONU, que estuvo destinado en muchos países y convivio con comunidades cristianas de base y misioneros. Es laico pero católico de corazón. Tiene poca formación teológica a pesar de que es una persona muy formada, ingeniero agrónomo y economista, Y con mucha relación con personas de distintas religiones. Ahora está en la oficina de Roma. Viaja mucho a Ginebra y a Nueva York... su esposa es muy afín al Opus Dei.


Todo lo que sigue es de él:

Estimado José Carlos: en estos tiempos turbulentos, de retroceso de libertades y silencios causados por la crisis económica que amedrenta a la gente, resulta un alivio contemplar que aún haya personas dispuestas a luchar y a pregonar porqué luchan.
Me refiero e tu batalla contra una nulidad matrimonial forzada, forjada por mentes llenas de malicia, hecha sobre complicidades que incitan a sospechar de una cofradía siniestra: la de los curas que olvidan en la vida cotidiana el sacerdocio, la representación de Cristo ante el pueblo.
No cabe en cabeza humana (honrada) que se pueda anular un matrimonio canónico con el testimonio en contra de quien lo bendijo. Y queda sobre todo la sospecha de algo que puede parecer novelesco:
Un cura y una feligresa cometen el pecado carnal (un solo beso es suficiente) y, encendidos de necesidad, traman la disolución del matrimonio por el medio más vil, el de la mentira.
No es que, acogiéndose a la legislación vigente, se vaya a producir un divorcio, la rotura de un contrato por diferencia entre partes; es que se toca en un sacramento.
En principio, parecería que la mujer en cuestión quisiera seguir en el seno de la Iglesia, lo que la llevaría a pensar en disolver su vínculo desde la misma Iglesia.
Pero los hechos demuestran que esa pobre criatura, quizá enloquecida por los requiebros de su amante (en sentido estricto: quien la amaba), consintió en lo inverosímil: anular un matrimonio canónico para después celebrar matrimonio civil con el cura de sus amores.
Y no nos desviamos de la realidad llamándole cura al novio, pues nunca pidió dispensa; y es de conocimiento público en La Coruña que llegó al altar de la Colegiata para oficiar lo que ya quedaba fuera de sus posibilidades.
Es enorme el escándalo que causa el caso en que te has visto envuelto, José Carlos, entre los que todavía tenemos Fe y entendemos que la Iglesia obliga con sus reglas.
Ahora es de esperar que en nuestra Iglesia, Católica, Apostólica y Romana, aún queden conciencias claras y temor de Dios; que alguien te escuche y se produzca la vuelta atrás, a la "anulación de la nulidad", frase que, por contener dos negaciones, conduce a una reafirmación.
Si eso se produjese -y al Espíritu Santo pedimos que ilumine las mentes-, nos encontraríamos ante un caso de bigamia (de la mujer) y de suplantación de funciones (del cura amante).
Quizá tanto escándalo asuste a la jerarquía; pero, por mucho que la asuste, no la ha de asustar más que los infinitos casos de pederastia y homosexualidad que se van descubriendo entre el clero católico en todo el mundo.
Siento tener que decir -por lo que te duela, José Carlos- que, por lo menos, se trata de un caso de "sexo consentido entre adultos", como explicitan diferentes leyes mundo adelante; y que el "sexo" (la comisión de actos sexuales) era entre hembra y varón.
Tampoco se les vaya a disculpar por eso a los amantes casados ante un juez, pues ambos quebraron promesas y votos, mintieron para satisfacer su amor.
Con mis deseos de que el Señor te ilumine por los laberintos en que te hicieron entrar,
Cordialmente,
Emérito

lunes, 25 de octubre de 2010

Yo no te espero, Benedicto XVI


• ¿Por qué yo no te espero, Benedicto XVI?
Carta de un sacerdote valenciano al Papa Benedicto XVI.
1- Porque atacas la eutanasia y defiendes el valor del sufrimiento.
2- Por considerar el aborto como homicidio en todos los casos.
3- Porque haces el divorcio muy difícil y conviertes la vida de "pareja" en un infierno para ellos y sus hijos, provocando la violencia doméstica.
4- Por impedir otros tipos de matrimonio o uniones, que en nada perjudican ni atacan al matrimonio convencional. Es falso que la familia en España esté sufriendo ningún tipo de ataque, como dicen tus obispos.
5- Porque tienes homofobia a los homosexuales, al considerarlos una desviación moral, una enfermedad o un pecado.
6- Por querer enseñar la religión de modo obligatorio a todos, en lugar de reservarla al ámbito familiar o de la comunidad creyente.
7- Porque no respetas el laicismo, que es el estado primitivo del individuo.
8- Por oponerte a la utilización de células-madre, que Tantas vidas podrían salvar.
9- Porque sigues bautizando a los niños, seres Inconscientes del acto que reciben.
10- Por convertir la comunión de los niños y niñas en un acto de ostentación y riqueza, contraviniendo la vida de Jesús-Pobre.
11- Por callar tus obispos y sacerdotes, en las fiestas de los pueblos, con motivo de honrar a santos y a vírgenes, cuando se tortura y mata a animales indefensos e inocentes.
12- Porque rechazas el preservativo, elemento indispensable para regular el número de hijos y evitar el Sida.
13- Por acumular riquezas en el Vaticano y en todos los templos De Tu Iglesia, habiendo dicho Jesús que Él no tenía dónde reclinar la cabeza.
14- Porque tú y la jerarquía que diriges deseáis el poder, cuando el Maestro vino a servir y no a ser servido.
15- Por rechazar la píldora, medio eficaz para ejercer una paternidad responsable.
16- Porque sois "repartidores de sacramentos" en lugar de transmisores de la Buena Nueva.
17- Por imponer el celibato a todos los sacerdotes, sabiendo que no fue así en la Iglesia Primitiva.
18- Porque habéis convertido la Iglesia en una burocracia descomunal, alejándoos de la simplicidad de los primeros cristianos.
19- Porque gran parte del clero se empeña en vivir "del altar", en lugar de ganar el pan con el sudor de vuestra frente y repartir gratis los que gratis se os dio.
20- Porque os falta contundencia en rechazar las guerras y condenar a quienes las inician.
21- Por no oponeros frontalmente a los estados que aplican la pena de muerte: China, Irán, USA, etc
22- Porque dais un mensaje de la Navidad equivocado. Cristo no vuelve a nacer. Y si está en algún lugar, está en los pobres, emigrantes, desheredados, etc.
23- Por transmitir durante la Semana Santa un mensaje que es ajeno al Evangelio. El sufrir por los demás es heróico; pero esto no trasciende. Dar la vida por los otros sí que encaja con la Pasión
24- Porque vas a provocar un gasto público (del dinero de creyentes y no creyentes) que es escandaloso: adorno floral (46.000 ?), bandas de música cada "x" metros, escenario descomunal (600.000?), alojamientos de miles de curas y obispos, pintado de 80 km. de vallas de blanco y amarillo, etc.
25- Por no colocar a la mujer en el lugar que le corresponde en la Iglesia que diriges.
26- Porque no pediste perdón cuando fuiste a Auschwitz, ya que el Vaticano y la Iglesia contribuyeron a que murieran muchos judíos en los campos de concentración.
27- Por haber perseguido y condenado la Teología de la Liberación, la Teología de los Pobres. Cuando dirigías la Congregación del "Santo" (¿?) Oficio.
28- Porque tu venida se va a convertir en un espectáculo de masas, en un gran circo, donde se podrán comprar y vender todo tipo de "recuerdos", pero que quedará un gran vacio. (Recuerda la expulsión de los mercaderes del Templo).
29- Por haber puesto una condición para tu venida (tú o tus enviados): un micro-clima para ti. Unos cuantos "puentes" más allá, en el de Ademuz, hay centenares de subsaharianos que no tienen ni lo más elemental para tener una vida digna.
30- Porque el Altar donde vas a celebrar la Misa es un ejemplo de derroche suntuoso. Existen en nuestra Comunidad barracones en lugar de aulas, listas muy largas de espera para pacientes, suciedad y ratas en los barrios de Valencia, etc.
31- Por tu intromisión en los asuntos internos del gobierno de España (Recuerda tu última entrevista con el Embajador Español).
32- Porque tus obispos se meten en asuntos políticos, siempre decantados a favor de la derecha más reaccionaria.
33- Porque el Congreso Teológico que se celebrará días antes de tu venida, estará manipulado por las personas más integristas, como son el Opus Dei, los Legionarios o los "kikos".

Una diócesis suiza reparte preservativos gratis a los ciudadanos


La Iglesia católica de la ciudad de Lucerna, en el centro de Suiza, distribuirá desde hoy y hasta el miércoles preservativos gratis a los ciudadanos, una iniciativa que se enmarca dentro de una campaña de prevención contra el Sida.

Aun a riesgo de contravenir los preceptos del Vaticano, la diócesis de Lucerna ya ha repartido cerca de 3.000 preservativos desde su puesto de distribución en la estación de tren de Lucerna, un éxito de un suministro que ha desatado tantas críticas entre colectivos católicos como alabanzas por parte de la sociedad civil.

Bajo el lema "olvidar es contagioso; protege al prójimo como a ti mismo", la Iglesia católica de Lucerna quiere atraer la atención sobre los riesgos de las relaciones sexuales no protegidas.

Mientras el obispado del cantón de Bale (al que pertenece Lucerna), ya ha anunciado que quiere informarse sobre los "deseos" de la campaña, sus promotores defienden que también quieren demostrar que la Iglesia católica "no está vetusta".

"Nuestra acción no es una provocación", explicó el responsable de una de las parroquias, Alois Metz, a un programa de la televisión alemana, y aseguró: "Nosotros debemos proteger la vida, y lo hacemos a través de los preservativos".

Angel Paz Gomez y Gea Escolano siguen callados




El silencio se ha hecho sobre la nulidad en la diócesis de Mondoñedo y que afecta directamente al obispo Emerito Gea Escolano por haber encubierto a ese cura y dejar que le nombraran arcipreste, porque si la nulidad es nula, que va a pasar en Mondoñedo…
Que el nombre de algún cura está implicado en una acusación de locura hacia el marido es evidente. Pero esa acusación puede ser falsa. Fruto del corporativismo en el clero.
¿Cómo se puede llevar a cabo un proceso de nulidad usando como motivo que uno de los cónyuges está desequilibrado psíquico y que tiene celos de un cura... cuando no había pruebas previas del desequilibrio del cónyuge y si las hubiera habido posteriores no son validas?.
En algún caso que conozco también usaron el testimonio de personas que no están capacitadas para diagnosticar y en algún otro caso el propio cura que celebró la boda de los conyuges después de varios años de matrimonio fue a declarar contra uno de ellos después de haberle servido antes de casado en la parroquia y después de casado 12 años, para servir al cura era apto, ... pero el cura le vendió la moto a su feligrés diciéndole que le había hecho un favor declarando en su contra para que quedara libre...

y sobre todo cuando ese cura del que se decía que el marido estaba celoso terminó casandose con la feligresa. Si no es por las denuncias de los feligreses y de las publicaciones en el blog D. Francisco José de la Cigoña le siguen ustedes manteniendo... Y para colmo después de casado les da el pago celebrando misas en la Colegiata...
Los procesos de nulidad matrimonial “tienen una relación esencial con la búsqueda de la verdad objetiva”.
Desde siempre la cuestión ética es puesta con especial intensidad en cualquier tipo de proceso judiciario. Los intereses individuales y colectivos pueden inducir a las partes a recurrir a varios tipos de falsedad y hasta de corrupción con tal de conseguir sentencia favorable.
De este riesgo no son inmunes los procesos canónicos. En nombre de supuestas exigencias pastorales, algunas voces se han elevado para proponer el declarar nulas las uniones totalmente fallidas. Para obtener tal resultado se sugiere recurrir al expediente para mantener las apariencias procesales y sustanciales, disimulando la inexistencia de un verdadero juicio procesal
los obispos están llamados a comprometerse en primera persona para cuidar de la idoneidad de los miembros de los tribunales de los que ellos son los moderadores, y para acertar la conformidad de las sentencias con la recta doctrina.
Gracias a Dios, no faltan fieles cuya conciencia no se deja engañar, y entre ellos se encuentra también no pocos que, a pesar de estar involucrados en primera persona en una crisis conyugal, no están dispuestos a resolverla sino siguiendo la vía de la verdad
Los obispos están llamados a comprometerse en primera persona para cuidar de la idoneidad de los miembros de los tribunales de los que ellos son los moderadores, y para acertar para la conformidad de las sentencias con la recta doctrina
Aquel que verdaderamente actúa como juez, es decir con justicia, no se deja condicionar ni por sentimientos de falsa compasión por las personas ni por falsos modelos de pensamiento, incluso estando estos difundidos en el ambiente. Él sabe que las sentencias injustas no constituyen jamás una verdadera solución pastoral, y que el juicio de Dios sobre el propio actuar es aquello que cuenta para la eternidad
Sr Angel Paz Gomez, le sigo preguntando:
¿El caso del sacerdote que participó en la ceremonia y después en el proceso de nulidad en contra de uno de los cónyuges podría tratarse de un caso de corporativismo en el clero?



domingo, 24 de octubre de 2010

Tercer Congreso de Evangelización Mundial en Sudáfrica


El Congreso de Lausanne, es impactante en todos los sentidos, no solo por el poder y autoridad de la Palabra impartida por expositores bíblicos de la talla de John Pipper, Samuel Escobar, y otros, sino por la interacción continua, intensa y efectiva con decenas de personas que están dirigiendo y coordinando acciones evangelísticas en diferentes lugares del mundo, dijo Jesús Carames.

Joseph Handley, del ministerio «Acceso al Asia» explicó que «el evento se lleva a cabo una vez cada 15 o 20 años, así que es algo significativo que marca el curso de la evangelización mundial para las próximas dos décadas». Miles de personas también estarán participando en 385 sitios globales denominados GlobalLink, en 74 países. En España son 14 las sedes en las que se está siguiendo el Congreso.

Según Handley, «al final de este congreso de diez días de duración, esperamos idear un mayor sentido de unidad en el cuerpo de Cristo en todo el mundo, un mayor sentido de claridad para el Evangelio y, finalmente, las prioridades principales de la tarea que tenemos por delante, alcanzar el mundo para Cristo».

El mayor congreso de evangelismo de los últimos años ha comenzado con la atención puesta en la persecución que aún en pleno siglo XXI sufre la iglesia en el mundo. La delegación China, formada por más de 200 cristianos que se iban a desplazar a Ciudad del Cabo para participar de 'Lausana 3', no ha podido asistir debido a la prohibición del Gobierno chino, que consideraba este encuentro una «amenaza a la seguridad del Estado».

En España hay un grupo de Iglesias, seminarios, instituciones que van a estar recibiendo partes del programa. Cada uno de ellos escogerá el formato y el horario en el que va a estar conectado al Congreso. Todas las charlas van a estar traducidas al castellano. El propósito de este congreso es el de convocar a líderes cristianos de todo el mundo para confrontar los asuntos vitales para nuestro tiempo y ayudar a desarrollar un nivel de unidad, colaboración y trabajo conjunto más profundos en la tarea constante de llevar todo el evangelio a todo el mundo.

La llamada “bancada evangélica”, integrada por pastores, creció de forma exponencial pasando de 41 diputados y dos senadores a 68 diputados y tres senadores, un aumento de 65 por ciento. Entre los electos destacan 19 parlamentarios de las Asambleas de Dios (que tenía sólo nueve diputados), 11 de la Iglesia Bautista, cinco de la Presbiteriana, cuatro del Evangelio, tres de la Iglesia Internacional y dos de la Maranata, entre las más destacadas. En total suman 12.5 por ciento de la cámara. Por el contrario, la “bancada católica” se redujo de 30 a 21 diputados activos, en general sacerdotes.

La mayor parte del episcopado católico, encabezado por el conservador arzobispo de Sao Paulo, Odilio Sherer, hace una defensa intransigente de la vida, y se posiciona contra el aborto en cualquier circunstancia, lo que fácilmente se interpreta como una crítica a Rousseff. En paralelo, la “bancada evangélica” se propone frenar el Plan Nacional de Derechos Humanos porque incluye la flexibilización del aborto.

“Es un extraordinario privilegio para África, que se está convirtiendo rápidamente en un centro para las misiones mundiales, recibir a hombres y mujeres que Dios trae de todas partes del mundo en el comienzo de un nuevo capítulo del siglo XXI”, dijo el arzobispo Orombi.


Condenan a 21 años de cárcel a un ex cura británico por abusos sexuales a menores


El inculpado negó los hechos hasta el final.

londres/dpa.

Un ex cura católico fue condenado ayer a 21 años de prisión por abuso de menores, después de que el tribunal considerase probado que el párroco, en la actualidad de 73 años, había abusado de niños pequeños entre 1959 y 1983 en un total de 21 casos. El inculpado negó los hechos hasta el final. El abuso comenzó en los años cincuenta. En 1971, el condenado fue ordenado sacerdote.
Durante años, el acusado evitó ser procesado y en 1985 huyó a Estados Unidos. Las autoridades de California lo extraditaron el año pasado a su país. El juez reprochó al acusado «tener dos caras y ser un manipulador». En la sentencia, el magistrado dijo que los abusos eran «increíblemente horrorosos».

Este nuevo escándalo que salpica a la Iglesia Católica puede tener consecuencias, ya que durante el juicio se constató que la archidiócesis de Birmingham le pagó un salario mensual de 800 libras (896 euros) hasta diciembre de 2001, pese a estar al tanto de las acusaciones que había en su contra.

sábado, 23 de octubre de 2010

"Hay que acabar con los privilegios de la Iglesia"


Una concentración laicista pide un Estado más aconfesional

El lider de Izquierda Unida Cayo Lara en el acto Convocatoria por un estado Laico.PUBLICO Reyes SedanoNoticias relacionadasMadrid celebra hoy su gran marcha laicistaUn dia del Papa a BarcelonaLa Conferencia Episcopal considera "un negocio" la visita del PapaLa visita papal costará 1,8 millones públicosLa indignación y la reivindicación festiva se mezclaron en el emblemático Parque de la Cornisa de Madrid, en el que Antonio María Rouco Varela quiere construir su minivaticano. Indignación porque la Iglesia católica siga siendo "la institución más subvencionada del país", como denunció el coordinador general de Izquierda Unida, Cayo Lara, en su discurso ante el medio millar de asistentes al primer gran acto unitario laicista que tiene lugar en España.

La concentración, convocada por más de un centenar de organizaciones sociales, políticas y sindicales de ámbito estatal y territorial, capitaneadas por Europa Laica, pretendía reclamar a las instituciones que retiren a la Iglesia los privilegios de los que disfruta en España.

Los cientos de asistentes a la concentración, que se cerró con el Canto a la Libertad de José Antonio Labordeta, lucieron pancartas con lemas tan expresivos como "Cada creyente pague su ente", en referencia a los 10.000 millones de euros que, según Europa Laica, recibe la Iglesia católica española del Estado. Otros carteles reclamaban que "Papa o califa, paguen sus visitas", poniendo el dedo en la llaga de los cientos de miles de euros que las administraciones públicas gastarán en la próxima visita de Benedicto XVI a España, el 6 y 7 de noviembre en Santiago de Compostela y Barcelona.
En este video se puede ver al emperador absoluto del Vaticano pasando por la via de la Consolazione en Roma, con todo su cortejo de coches de lujo y motos de escolta, incluido el mercedes blindado en el que viaja: