sábado, 3 de abril de 2010

El Vaticano compara las críticas a Benedicto XVI con el antisemitismo


En defensa del Papa salió también hoy el cardenal emérito de Milán, Carlo Maria Martini, quien dijo que las acusaciones contra Benedicto XVI por la supuesta ocultación de denuncias sobre casos de sacerdotes pederastas son «innobles» y «falsas» y que, frente a esos casos la Iglesia debe actuar con «humildad».
«El Papa no necesita que le defiendan, porque para todos está clara su conducta irreprochable, su sentido del deber y su voluntad de hacer el bien», dijo el jesuita.



Parece mentira que la Iglesia Católica haga estas declaraciones hoy en dia después del bochornoso silencio que guardó durante la Segunda Guerra Mundial ante la masacre de judíos y otros pueblos y grupos sociales como los homosexuales, gitanos o izquierdistas.
¿Pretende compararse el Papa con 6 millones de judios asesinados? Si se le critica es por encubridor, no puede compararse conun sólo inocente. La arrogancia narcisista es el mal endémico de la iglesia y lo que les llevará a la ruina.
La Iglesia Católica sino toda gran parte de ella esta involucrada en diferentes grados, unos porque son deleznables pederastas, otros por ser cómplices, otros por colaborar en brindarles oportuna impunidad y traslados de parroquias para que zafen, otros por tomar conocimiento de los hechos e encubrir los delitos y avalar los traslados, otros por preocuparse de pedir más indulgencia y comprensión y menos castigos.... y otros por sembrar cortinas de humo en que estos son ataques injustos e ideológicos en contra de la Iglesia. .... Serio. Cuando el tema no es menor, de ocurrencia en diferentes países y se encuentran comprobados. Sin duda que huele mal. A cadáver en descomposición.
Años y años de pasividad y encubrimiento querrán que no sean juzgados por la sociedad, el cinismo de esta gente no tiene limites, al final serán las victimas de toda esta historia, cosa que se les ha dado muy bien lo largo de la historia, por cierto, en el tema del antisemitismo pueden dar lecciones magistrales y de silencio ante el holocausto también.
No echemos todas las culpas a Benedicto XVI. Es curioso recordar como el teólogo de la liberación nicaragüense, Ernesto Cardenal, hincado de rodillas en el aeropuerto de Managua, escuchaba en 1983 la bronca que le daba el papa Juan Pablo II, mientras que en aquella época el Vaticano apoyaba sin fisuras a Marcial Maciel, del que ya se habían hecho públicos sus abusos sexuales sobre sus propios pupilos.
Tan acorralados se sencuentran -pero no se sienten-, no nos confunden aunque sea esa la finalidad-, que lo suyo es echar balones fuera y, ahora, en el colmo de los disparates se dicen tan víctimas "sufrientes" como los afectados por el antisemitismo. Aclaremos el jeroglífico con el cual pretenden hacer errar a la opinión pública: quién o quiénes han cometido -y cometen- los delitos de abusos a menores ? Quién o quiénes a sabiendas han ocultado y ocultan tales perversos delitos ?

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